Unas reflexiones sobre las Jornadas El Escorial «Practica el Genchi Genbutsu»

El pasado jueves y viernes se celebró la 4º edición de las Jornadas El Escorial organizadas por la Fundación Signo, “Lean en procesos sanitarios. Practica el Genchi Genbutsu”. El formato, 4 talleres de dos horas por los que circularon unas 100 personas. Hay un buen resumen de las jornadas en Diario Medico, por lo que no voy a entrar en el mismo tema. Voy sin embargo a tratar de dar mi visión como ponente.

La primera idea cuando me lo propusieron fue de una cierta duda. Por una parte repetir 4 veces el mismo tema (Gestión de citas) me parecía extraño. Por otra parte, cumplir con el lema de las jornadas, “Practica el Genchi Genbutsu” parecía imposible.

Empiezo por la repetición, al terminar, me di cuenta de que lejos de haber repetido 4 veces la misma historia, he participado en 4 experiencias distintas, con el mismo denominador, pero con la riqueza tremenda de la posibilidad de enfrentar a tantas personas con un mismo tema. Espero que los participantes aprendieran en las sesiones. Yo aprendí MUCHO.

Lean en procesos sanitarios

La segunda parte parecía imposible técnicamente. ¿Cómo se puede traer un proceso que dura semanas o meses a una sesión de dos horas? Genchi Genbutsu es uno de los pilares de la resolución de problemas de la metodología Lean. Es aceptar que la única posibilidad que hay de resolver un problema es viviendo el problema. Y eso sólo se puede hacer desde el Gemba, el campo de batalla, el teatro de operaciones…

Alberto me resolvió el problema. “Y si simulamos con un ordenador el proceso y hacemos girar el taller en torno a la simulación?” Parecía una buena idea…“¡¡Se tienen que ver los muñecos moverse!! Sólo así serán conscientes de lo que ocurre en un proceso sanitario y de la dificultad de la citación.”

Y eso hicimos. La simulación mediante un ordenador permitió que se viviese el problema. Al menos un poco. Y que como tantas veces, al preguntar 5 veces por qué descubriésemos que el problema de la citación no es el que parece, y que tiene una relación directa con el MURA, la variabilidad.

En fin, muchas gracias a la Fundación Signo, a Pep, a Diego, a Pablo, A Marta, y muy especialmente a Isabel Rodrigo que nos facilitó el trabajo a los ponentes. ¡¡¡Así da gusto!!!